Como si fuera una historia épica, Santino murió en su ultima batalla. Esta vez ni la pericia ni la suerte estuvieron de su lado. Ni los cuidados y protección de su mama que quedo destruida por la derrota contra la ferocidad del rival.
En solo tres días, lo que era hermoso, divertido y hasta fastidioso pero con gusto, se esfumo. No nos dio el tiempo necesario para entender el por qué.
Santino era un luchador. Pero justamente su Corazón Valiente lo mantuvo con vida hasta el ultimo minuto, donde ni su mama pudo salvarlo esta vez.
Para muchos sera una execración. Para otros dirán que en el mundo hay mayores problemas de que preocuparse que por esta muerte.
Existirán los que condenen los gastos y la pena por llorar por Santino.
Pero hay otros que entenderán que la vida es una sola, que muy pocas veces se te cruzan por el camino individuos que te hacen feliz con su sola presencia o porque necesitan de tu cuidado.
Santino, siempre te vamos a recordar como ese perrito pequeño que un día guiñandonos un ojito, nos dijo: mejor me voy, no se hagan problema.
Hasta la próxima Corazón Valiente.
Hasta siempre SANTINO.
martes, 29 de abril de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SUR
Este es un pequeño espacio donde aquellos que queremos a nuestros barrios de Av. San Juan/Directorio al Riachuelo (ese lugar olvidado por aquellos que nos gobiernan) se convierta en una tribuna de opinión, de cultura y de aportes nobles.
Tambièn es un gusto que me doy para despuntar inquietudes literarias dormidas o postergadas.
Estas invitada e invitado a participar. Como se te ocurra ....dejando tus comentarios, enviando un mail con algo que se te venga en ganas... como vos quieras...
Gracias....
Daniel
Tambièn es un gusto que me doy para despuntar inquietudes literarias dormidas o postergadas.
Estas invitada e invitado a participar. Como se te ocurra ....dejando tus comentarios, enviando un mail con algo que se te venga en ganas... como vos quieras...
Gracias....
Daniel
No hay comentarios:
Publicar un comentario